¿A dónde piensas salir de vacaciones en Semana Santa? ¿Qué te parecería conocer una zona arqueológica? México presume de una amplia herencia cultural en forma de ruinas y espacios arqueológicos que le permite atraer visitantes que gastan más dinero en el destino (viajeros Premium), pero quienes recientemente comenzaron a dejar de venir por diversas razones.
Las zonas arqueológicas más espectaculares descubiertas hasta hoy pertenecen a las culturas teotihuacana y maya, pero el país cuenta con cerca de 2 mil sitios que han preservado evidencia de grandes civilizaciones, de los cuales 189 están bajo resguardo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y abren al público todo el año.
El acceso es gratis para personas mayores de 60 años y menores de 13, así como para jubilados, pensionados, discapacitados, profesores y estudiantes.
Sede de la gran Pirámide del Sol, Teotihuacán es el complejo arqueológico preferido por las personas. La cantidad de visitantes se multiplicó al ser declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1987, lo que hizo del sitio uno de los mayores polos de atracción turística del país.
No obstante, la también llamada Ciudad de los Dioses comenzó a recibir menos visitantes el año pasado por primera vez desde 2012.
Datos del INAH señalan que Teotihuacán atendió a 4 millones 67 mil visitantes en 2018, 118 mil menos que en 2017. Ocho de cada 10 personas que ingresan son mexicanos, mientras que el resto son extranjeros.
Sólo por detrás de Chichen-Itzá, Tulum es el tercer sitio arqueológico más frecuentado en México, donde, a diferencia de Teotihuacán, seis de cada 10 visitantes son de otro país.
Edificado sobre un acantilado a orillas del mar caribe, Tulum alberga parte de las majestuosas ruinas de la cultura maya, reconocida por llevar a la perfección la astronomía, las matemáticas y desarrollar el más avanzado sistema de escritura del continente.
La ciudad ancestral atrajo a 2 millones 190 mil visitantes el año pasado, una disminución de 18 mil personas con relación a 2017 y significó la primera vez que atiende menos viajeros desde la crisis internacional de 2009.
Concentración de viajeros
Teotihuacán y Tulum, en conjunto, cautivaron a cuatro de cada 10 personas que decidieron visitar alguna de las 189 zonas arqueológicas del país en 2018.
El especialista en turismo por la Universidad Iberoamericana, Gerardo Herrera, asegura que “la cultura atrae a un viajero más sofisticado y educado, con mayor poder de compra, en lugar de turistas mochileros”.
La Organización Mundial del Turismo (OMT) calcula que cuatro de cada 10 turistas internacionales realiza alguna actividad cultural durante su viaje, como visitar una zona arqueológica o un museo.
Para Herrera, promover las zonas arqueológicas es importante en el turismo porque no sólo se trata de atraer más visitantes, sino de mejorar la calidad de éstos, es decir, que las personas que llegan gasten más recursos.
Desde antes de tomar el cargo como titular de la Secretaría de Turismo (Sectur), Miguel Torruco dijo que el gobierno federal tiene como nueva misión enfocarse más en el incremento de la derrama económica, que en la cantidad de turistas que llegan a México.
“Está muy bien el objetivo del nuevo gobierno, pero no veo los medios para lograrlo”, opina Herrera.
El académico expone que las zonas arqueológicas recibieron menos visitantes el año pasado por factores que pudieron ser tanto coyunturales como estructurales. Unos están relacionados con la percepción negativa sobre la inseguridad en algunos recintos culturales, alentada por hechos delictivos y por las alertas del gobierno estadounidense.
“Todavía es temprano para que suenen las alarmas por la menor llegada de visitantes a Teotihuacán y Tulum, pero debería haber preocupación”, expresa Herrera, y dice que falta marketing en los sitios arqueológicos del país y que la facilidad de acceso es fundamental para que los turistas visiten otros sitios culturales y no se concentren en unos cuantos.
El director de la Facultad de Turismo y Gastronomía de la Universidad Anáhuac, Francisco Madrid, expuso que se debe evaluar que los otros destinos estén preparados para recibir a más personas.
Mediante su Comité de Turismo, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) reconoce que el turismo cultural es uno de los mercados globales más grandes y de mayor crecimiento.
(El Universal)