Lo que era una hacienda henequenera hoy alberga uno de los hoteles más espectaculares del país y el restaurante más hermoso del mundo, según los premios internacionales Prix Versailles, otorgados por la UNESCO y la Unión Internacional de Arquitectos.
Dentro del hotel Deluxe Chablé Resort & Spa, en Yucatán, se encuentra el restaurante Ixi’im, el cual fue creado por la diseñadora de interiores Paulina Morán y cuyo menú fue ideado por el chef de Quintonil, Jorge Vallejo.
El diseño de Ixi’im integra el pasado y el futuro y celebra la rica herencia cultural y estética de Yucatán, utilizando materiales como el metal, cristal, pisos de pasta, maderas y piedras de la región.
Este restaurante se construyó a partir de una serie de estructuras independientes del siglo XIX, restos de una fábrica de cuerdas, tejidos y costales que formaban parte de la hacienda henequenera que se ubicaba en Chablé.
Las puertas de la terraza se abren completamente para integrar de forma extraordinaria la naturaleza y belleza exterior. Los lavabos son un diseño original de cantera machueleada, con un rosetón de mármol blanco, y en cada uno de los muros del restaurante se utilizó cantera galarza y chukúm, los cuales se colorearon con una técnica maya para simular superficies aterciopeladas y bidimensionales, aunque en algunos puntos se conservaron las paredes originales.
Los pisos son de pasta, realizados con la técnica original de Yucatán y pintados a mano en blanco y negro con intervenciones de decks en madera cumarú.
Dentro del restaurante se exhibe la colección más grande del mundo de botellas de tequila, la cual fue certificada por los “Record Guinness”. Paulina Morán diseñó una estructura de metal y cristal flotante, casi sin tocar los muros originales, que presenta la colección como una pieza de arte. ¡Son 3 mil 500 botellas y todas son distintas!
La barra principal es una pieza única, realizada con partes de camiones y un espejo envejecido, última obra del artista local George Samuelson. Asimismo, el escritorio de la recepción fue creado con una sola pieza de madera y una estructura de piedra semipreciosa.
Para no afectar la naturaleza y originalidad del edificio histórico, Ixi’im cuenta con techos falsos de madera que reducen el ruido y además cobijan al visitante. El diseño de la lámpara principal está inspirado en los guajes mexicanos, una raíz que se vacía y se utiliza como recipiente, la cual fue pintada de negro y su interior forrado con hojas de cobre que provoca una iluminación que juega con la luz y con espacios en penumbra: un espacio hermoso que celebra el ambiente de Yucatán.
Este maravilloso espacio resulta ideal para albergar la cocina mexicana con matices del sureste mexicano del chef Jorge Vallejo. Para conocerla, la mejor opción es el menú degustación de seis tiempos, aunque hay platos a la carta que se antojan excepcionales, como el cerdo pelón con salsa de recado negro, el pato con mole de huitlacoche, el pulpo maya, la tártara de venado, los salbuts de cangrejo y, de postre, el helado de mantequilla con miel de abeja melipona.