El nivel del Río Hondo ha incrementado casi seis metros debido a las lluvias que no han dado tregua a la zona cañera de Chetumal, desde el 30 de mayo.
Los escurrimientos pluviales han abarcado varios cruces de agua en el sur del estado y han inundado las vías de comunicación terrestre que conectan a las comunidades de esta área con el resto de la entidad.
Cerca de 40 mil personas que habitan en la ribera del río y la zona limítrofe con Campeche podrían quedar aisladas y sufrir daños materiales en sus viviendas debido a que se prevé que las precipitaciones continúen debido a los efectos de la tormenta tropical Cristobal, que se formó esta mañana frente a la costa de Campeche.
En la ribera del Río Hondo frontera natural con Belice, los más de 200 milímetros de agua que cayeron acompañado de escurrimientos provenientes de Estados como Campeche y Tabasco, así como de Belice y Guatemala provocaron que el nivel del afluente aumentara casi seis metros, provocando la evacuación de las viviendas.
Las alcantarillas instaladas en caminos de acceso a poblados como la Unión y Revolución, han sido rebasados en su capacidad, lo mismo pasa en el camino que conecta Veracruz con Cedral, mientras que debajo del puente de Morocoy el agua sigue creciendo.
Afectaciones por los remanentes de la tormenta Amanda
Según delegados municipales, ayer hubo afectaciones en al menos 35 de las 85 comunidades del municipio; una de las más afectadas fueron Cacao, Esteban B. Calderón, Cocoyol, Revolución y La Unión, que son zonas asentadas en las orillas del Río Hondo.
Mientras que en la zona Ucúm-Nicolás Bravo, se registraron afectaciones en González Ortega, Nachi-Cocom, Francisco Villa y al menos tres colonias de la Alcaldía de Nicolás Bravo.
Los escurrimientos que bajan al sur de Quintana Roo y adicionalmente las lluvias que no paran desde el 30 de mayo, también han alcanzado las viviendas; en un recorrido que realizó la CNPR ayer por la mañana, en la mayoría de los 15 ejidos de la zona cañera, se tomó evidencia de los campos de cultivo que se encuentran bajo agua, constatando que la situación es de gravedad para algunos de los aproximadamente tres mil productores de caña de azúcar.
(Con información de Carlos Castillo/SIPSE)