Cerca de 153 empresas constructoras de las 256 que existen en el sur de Quintana Roo se encuentran en números rojos debido a la falta de proyectos de obra tanto privados, como públicos, principalmente en el ámbito municipal.
Diego Cortés Arzola, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), delegación Quintana Roo, dijo que a pesar del nulo respaldo de las autoridades othonenses para dinamizar este sector, el siguiente mes se espera un “alivio” para los agremiados de Chetumal con la licitación de 12 obras por la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (Capa) y otras 15 del Instituto de Fomento Educativo de Quintana Roo (Ifeqroo).
“Las pausas en las licitaciones públicas por parte del gobierno municipal han provocado que al menos 18 empresas locales de este sector cierren sus puertas, lo que ocasionó una pérdida de más de 250 empleos. En su mayoría eran empresas pequeñas que no lograron sostenerse esperando a que se aprueben las obras”, explicó.
De acuerdo a la Encuesta Nacional de Empresas Constructoras (ENEC), el sector de la construcción en Quintana Roo desde el 2014 ha venido registrando una baja de entre el 10% y el 14% anual en su valor económico.
Hace cinco años, el sector privado movilizaba en el ramo de la construcción más de 11 mil 870 millones de pesos en la entidad.
“Lo que observamos es que cada vez menos empresas y particulares invierten en esta actividad en el sur de Quintana Roo, mientras que los recursos federales y municipales continúan disminuyendo. Afortunadamente, las obras del gobierno estatal han permitido sortear esta recesión”, puntualizó Cortés Arzola.