Los agricultores británicos se están manifestando de forma masiva en Londres contra las propuestas del gobierno laborista de Keir Starmer, que consideran una amenaza directa para el futuro de la agricultura en el país. La manifestación, denominada «RIP British Farming», ha llenado las calles de Westminster este miércoles, 11 de diciembre, con la llegada de cientos de tractores desde diferentes regiones de Inglaterra, incluidos Exmoor, Shropshire y Somerset.

El evento, organizado por las asociaciones Kent Fairness for Farmers y Save British Farming, busca denunciar las medidas fiscales propuestas por el gobierno en el primer presupuesto de la canciller Rachel Reeves. Entre estas, destacan los cambios al impuesto de sucesiones agrícola, calificados por los organizadores como «tóxicos» y una «sentencia de muerte» para la agricultura británica.

La polémica propuesta incluye la implementación de un impuesto del 20% sobre tierras agrícolas valoradas en más de un millón de libras. Según los agricultores, esta medida hará inviable la transferencia de propiedades a las futuras generaciones, dejando a las familias que dependen de la agricultura en una situación de ruina económica. Jeff Gibson, fundador de Kent Fairness for Farmers, declaró: «Estamos orgullosos de alimentar al país, incluso sin obtener grandes beneficios, pero este cambio fiscal destruirá nuestras esperanzas de pasar las granjas a nuestros hijos».

Liz Webster, líder de Save British Farming, calificó la medida como una «ofensiva estalinista» que pone en riesgo la capacidad de Gran Bretaña para garantizar su seguridad alimentaria. Webster advirtió: «La capacidad de producir nuestros propios alimentos es esencial para la seguridad nacional. Keir Starmer debe escuchar a los agricultores y reconsiderar este ataque a la agricultura».

Los tractores han empezado a llegar a Whitehall a las 10 de la mañana, donde se han congregado en una protesta masiva. Está previsto que a mediodía se realicen discursos y, posteriormente, los vehículos participen en un recorrido lento por el centro de Londres a partir de las 12.45.

El Daily Express, que lidera una campaña para proteger las granjas familiares, destacó cómo esta propuesta podría arruinar a numerosas familias agrícolas, eliminando la posibilidad de heredar tierras sin enfrentar una carga fiscal devastadora. Los agricultores piden al gobierno laborista que revierta esta medida antes de que cause daños irreparables a la industria agrícola y al suministro de alimentos del país.