Donald Trump fue concluyente: “Tenemos 52 sitios iraníes en la mira”. Lo dijo luego de que el régimen teocrático de Irán amenazara con represalias por la muerte de Qassem Soleimani, el jefe de las Fuerzas Quds, una organización catalogada de terrorista por Washington. El presidente de los Estados Unidos no especificó cuáles eran esos sitios, pero no hizo falta. Advirtió que la respuesta de su país sería “desproporcionada” si Teherán tomaba alguna vida norteamericana.
Y este lunes hizo una demostración de poder militar absoluto. La base operativa F-35 de la Fuerza Aérea realizó el 6 de enero una “caminata masiva de elefantes”, lanzando 52 aviones de forma ininterrumpida. “Caminata de elefante”, es un término utilizado por la Fuerza Aérea de los Estados Unidos para la movilización de un avión militar justo antes del despegue, cuando están en formación cerrada.
El Active Duty 388th y Reserve 419th Fighter Wings realizaron el Ejercicio de Poder de Combate para demostrar “su capacidad de emplear una gran fuerza de F-35A” y probar la responsabilidad del personal, la generación de aeronaves, las operaciones en tierra, las operaciones de vuelo y la capacidad de combate, según un comunicado de la Base Aérea Hill, en Utah.
The Fighter Wings reveló el lunes que los F-35A finalmente han alcanzado su capacidad total de guerra. “Estamos listos para volar, pelear y ganar”, tuiteó el 419th Fighter Wings después del ejercicio. Agregaron que el ejercicio “empujó los límites y probó la capacidad de nuestros aviadores para desplegar los F-35A en masa”.
El F-35 es el primero en combinar tecnología sigilosa de evasión de radar con velocidades supersónicas y la capacidad de realizar despegues cortos y aterrizajes verticales. Tiene la capacidad de operar desde tierra y mar y anteriormente ha sido aclamado como un gran salto en tecnología aeroespacial.
(Infobae)