La Real Fuerza Aérea del Reino Unido (RAF) mató a civiles durante su bombardeo más reciente de Irak, según una investigación de The Guardian y el grupo de monitoreo Airwars, publicada el miércoles. El informe contradice directamente las negaciones del gobierno británico de que los ataques aéreos de la RAF, dirigidos a terroristas del Estado Islámico, también mataron a no combatientes.

El Reino Unido se unió a la coalición liderada por Estados Unidos contra el Estado Islámico (IS, también conocido como ISIS) en 2014, y llevó a cabo múltiples ataques aéreos en Irak y Siria hasta 2020, lanzando más de 4.000 bombas. La coalición ha reconocido haber causado 1.437 muertes de civiles durante ese período, sin revelar qué países fueron responsables.

Según cifras oficiales del Ministerio de Defensa del Reino Unido, los ataques mataron a 1.107 militantes y un civil en Siria, y 3.052 militantes y ni un solo civil en Irak. The Guardian y Airwars, un grupo de monitoreo con sede en el Reino Unido que rastrea las muertes de civiles, investigaron el reclamo.

El medio de comunicación y la ONG revisaron más de 1.300 documentos de la coalición publicados al New York Times, así como la documentación del Ministerio de Defensa publicada en Airwars, para identificar 43 ataques en los que la RAF pudo haber estado involucrada. Se seleccionaron ocho ataques en las cercanías de Mosul y los investigadores realizaron entrevistas sobre el terreno.

De los seis ataques aéreos identificados como «probables» llevados a cabo por la RAF, la coalición había reconocido 26 víctimas civiles. Otras dos muertes de civiles fueron en un ataque aéreo confirmado de la RAF el 9 de enero de 2017, que Londres describió como la muerte de dos militantes.

Además de matar a familias enteras, los misiles británicos mutilaron e hirieron gravemente a varios niños, según la investigación.

Un portavoz del Ministerio de Defensa insistió a The Guardian que «no hay evidencia o indicación de que las víctimas civiles hayan sido causadas por ataques en Siria e Irak», citando «procesos rigurosos» establecidos para minimizar las muertes de civiles. El gobierno británico también ha rechazado las solicitudes parlamentarias para explicar cómo rastreó las víctimas civiles.

Si bien está de acuerdo en que el Reino Unido tiene algunas de las mejores protecciones civiles, el mariscal aéreo retirado Greg Bagwell le dijo a The Guardian que afirmar que había habido cero víctimas era un «tramo».

«Si dijéramos que somos un 90% mejores que todos los demás, ese podría ser un argumento creíble», dijo. «Cuando sigues diciendo que el número es cero y, por lo tanto, somos 100% perfectos, claramente se vuelve difícil vender eso».